domingo, 15 de octubre de 2017


EL CARRO DE LA LEJÍA, 15 de octubre 2017

La musa de la independencia

A estas alturas, hoy, víspera de que el Sr. Puigdemont, nieto de andaluza y sicario mayor de Artur (rey Arturo) Mas, descendiente de filibusteros como aclara la historia de su familia, se reconozca en sus intenciones con el sí o el no que tiene a todo el país en ascuas, estoy asqueado porque no me cabe en la cabeza que todos estos adalides de la independencia se basen en el resultado de una elecciones de chiste, sin ninguna garantía legal ni racional, con un resultado, como se está viendo por algunos mensajes entre ellos, previsto antes del misterioso recuento virtual; me pongo a pensar en la categoría humana e intelectual de estos líderes de afección pinocha y tan vana como atropellada ideología.
Junqueras ha dicho que el genotipo catalán se parece más al francés que al español. Viéndolo a él podríamos concluir que más parecido tiene con el oso astur, del lugar donde dice la historia que nació España. Desprecia a los españoles porque nos parecemos más a los portugueses. Pues, zafio ignorante catalán, ¿se ha informado usted de la amplitud de la cultura lusa, más expansiva que la española, desde 1498 (la India), 1500 (Brasil), 1513 (China), 1543 (Japón), citando solo las más importantes? Claro que usted, que miente como un bellaco en esa coral pinocha que se han inventado, atacará con las conquistas del “reino” (virtual) de Cataluña. Lo que es verdad es su pensamiento reaccionario, racista, equiparable al que defendían los hitlerianos y que originó uno de los mayores desastres históricos en el mundo. Sepa que los apellidos más frecuentes en Cataluña son García, Martínez y Sánchez. Su apellido, Junqueras, es de origen aragonés, linaje de infanzones, originarios de la villa de Alcolea de Cinca y en Fraga (Huesca) y Zaragoza, a partir de la segunda mitad del siglo XVIII; registrado en los fondos del archivo de la Real Audiencia de Aragón. Partido: 1º. Esta es la realidad y el origen de su catalanismo.
Es evidente que el camino irracional a la independencia está sometido al deseo terco e incombustible, sobre todo, de la CUP, que tiene una cabeza –con el mismo casquete de pelo que el Sr. Puigdemont bajo el que parecen no crecer ideas y sí destemplanzas–, visible en la diputada Anna Gabriel, musa celebrada de la independencia. Vean el mal gusto de quienes se ponen bajo su amparo político: la tal Anna Gabriel, –hija de un emigrante de Minas de Río Tinto (Huelva) y nieta de una emigrante también onubense– en un acto público hizo estas manifestaciones que la definen muy bien, con las que se definió muy bien: “Soy puta, traidora, amargada y mal follada”. Está publicado en muchos medios de información. Esta anticapitalista tiene un coche de marca española, Seat, aunque está contra España y contra la propiedad, y cobró en 2016 un total, entre sueldo e indemnizaciones para desplazamientos, de 99.300 euros, más que el presidente Rajoy, más que el presidente Puigdemont.  Su ideal vital es tener muchos hijos con diferentes padres y educarlos en una comuna con entera libertad. Esta inculta, profesora de Derecho –algo torcido por lo que demuestra–, que se ha leído mal a Rousseau, debería informarse con algún estudio antropológico brasileño –de Darcy Ribeiro, por ejemplo– de cómo se organizan las tribus indígenas del interior del país, con un enorme respeto por la libertad personal y social, sin actitudes de confusión vaginal ni autoritarismo machista.
Siento lástima por los catalanes de buena fe que van detrás del cargamento de mentiras ocultos tras una lona que dice España nos roba, somos mejor que los españoles, queremos ser un país libre, la historia nos reconoce, Europa nos espera, seremos una nación poderosa. Las grandes empresas, nada contagiadas de sentimentalismo, huyen de Cataluña como de un barco que se hunde. Espero que a los políticos de la tribu independentista les entre la misma cordura que  a los empresarios fugitivos.

                                                                                  PABLO DEL BARCO

viernes, 13 de octubre de 2017


EL CARRO DE LA LEJÍA, 13 octubre 2017-10-13

Otra vez los ultramontanos

Ayer, más que nunca, aparecieron ilustres titulares de la vida política española en el fiesta “real” del besamanos –besaculos, que diría mi amigo Almunia–, felices de poder acercarse a los reyes, que les vean y sepan que están aún ahí y que, no se olviden, lo están gracias a ellos, compadres algunos de la Constitución de 1978, consecuencia de la pseudotransición española, engaño mayúsculo, que no cerró las heridas de las dos Españas. De aquellos polvos estos lodos, de aquellas cobardías estos líos autonómicos, cuando podía haberse solucionado, al menos en parte, con la constitución de un estado federal, razonable para este país tan variado, moderna y equilibradora.
El catalanismo más furioso se está apoderando de esa España, esencialmente futbolera –¿no será intencionado el recurso?–, escasamente pensadora. Parece de chiste, pero vean la herencia del más furibundo de los independentistas, Carlos Puigdemont, sicario mayor de Artur Mas –¿se creerá el rey Arturo?–. Puigdemot es nieto de Manuela Ruiz Toledo,  “la andaluza”, nacida en La Carolin (Jaén) y emigrante a Cataluña cuando las minas de plomo de la región fracasaron. El abuelo, Francisco Puigdemont, era franquista, desertor del ejército republicano, y acabó acogido en Ubrique (Cádiz), donde le dieron amistad y trabajo. Todos en La Carolina reconocen a los Ruiz por el enorme tamaño de su cabeza; quizás de ahí venga la evidente cabezonería del líder catalán, que consigue tener a todo este país en vilo con declaraciones ambiguas, para no pillarse los dedos y, tampoco, la cartera.
Están mal representando una mala comedia con un mal guión, que quiere ser popular y termina haciendo el más espantoso de los ridículos, sobre todo porque un grupo de catalanes de buena fe no se dan cuenta de en qué manos están, estos trileros que acabarán llevándose el dinero de la mesa y dejando a los demás con cara de idiotas. En el “trile” o la “mosqueta” el engañado tarde en darse cuenta del engaño; cuando lo ve ya no tiene remedio.
Estamos siendo el hazmerreir de Europa, por lo menos. Charlie Hebdo, la revista de humor francesa que no disfraza la verdad aunque suene a grosería, lleva en su portada, refiriéndose al “procés” catalán, el título “¡Idiotez o muerte!”, desgranando las razones que tiene Cataluña para no ser desagradecida con España.  Dice: “La independencia de Cataluña no tiene como objetivo liberar a esta región de una tiranía que ya no existe, ni de permitir que la economía prospera, puesto que ya lo hace y, menos aún, para obtener el derecho de hablar una lengua autorizada desde hace muchos años”
Tendrían derecho –y obligación– a ser coherentes con ellos mismos, y tampoco lo hacen; son como una partida de trileros cambiando continuamente las reglas del juego, jugando unos contra otros, tratando cada uno de ser el más pícaro, el más desvergonzado, el más mentiroso, con caritas de hermanas de la caridad. A mí me avergüenza escucharles y lo único que concluyo es que son una partida de bandoleros queriendo, cada uno, llevarse la mayor parte del botín.
Ayer desperté pensando en el desfile de las fuerzas armadas en Madrid, con la imagen de unos de los aviones que sobrevuelan el acto, que se estrellaba contra el suelo. ¡Qué premonición! No me asusta porque me ocurre muchas veces. Ahora me gustaría tener ese poder para saber en que parará esta romería de necios ultramontanos a ningún lado que no sea la destrucción más inútil y empobrecedora de un país al que le está costando mucho remontar la herencia recibida por otros ultramontanos en 1936.

PABLO DEL BARCO

domingo, 8 de octubre de 2017


EL CARRO DE LA LEJÍA, 8 de septiembre 2017

A Artur Mas (que es menos) se le ve más (el plumero)

Al promotor, en la sombra, de la “Independencia” catalana, antes –según cuentan en los juzgados– artífice de corrupciones economicopolíticas, se le está viendo el plumero con los primeros vaivenes negativos de su cruzada fantoche independentista. Dijo, en voz alta y, a todo trapo, como se le exige a filibusteros ilustres y a sus descendientes, que ninguna –“ni una”– gran empresa abandonaría Cataluña en el caso de conseguir ser independiente. Ahora que se ha iniciado la desbandada de empresas sólidas y bancos de alto nivel –otra vez favorecidos por el Gobierno– es el primero que ha salido a la luz pública para decir que la independencia no es posible porque le faltan muchas cosas para poder serlo. ¡Qué forma de curarse en salud¡ ¡Qué poca consistencia personal y política¡ ¡Qué estafa de personaje, siempre con una sonrisa de hombre que se las sabe todas y que va a comerse el mundo¡ ¡Que desvergüenza lanzando a los demás a la batalla y quedarse él en la retaguardia con una copa de oro y su sonrisa estereotipada de prócer para la historia!
Es pura manipulación, como la de ayer, con miles de banderas españolas en la calle pidiendo diálogo, cuando el diálogo está roto y se quiere coser con la sombra de trompazos de los responsables del orden social. En ninguno de los reportajes que vi aparece ni una sola bandera republicana, que suele acompañar siempre estas manifestaciones multitudinarias. ¿Quién organiza este botellón político? Pensando en los que van a sacar el mayor rédito a esta manifestación –PP y Ciudadanos–, podemos pensar donde está el origen de la manifestación pro-diálogo. Precisamente en dos partidos que generalmente se niegan a dialogar y que desean la pronta aplicación del artículo 155 de la Constitución; es decir “palo y tente tieso”.
Aquí asoma la desvergüenza por doquier; el líder del PSOE ha estado escondido los días de mayores dificultades en esta movida; ahora que ya se vislumbra un poco de luz aparece, magnánimo y sonriente, como si fuera el gran mesías que arreglará el mundo. Pero ¿además de su sonrisa y  buena planta,  qué ofrece? No me cabe duda de que su alianza con Ciudadanos dio al traste con una posibilidad de gobierno de izquierdas. Los ciudadanos del PSOE, a partir un piñón con el PP en esta esperpéntica aventura del independentismo, han repetido a troche y moche que si no hay un gobierno de izquierdas fue por culpa de Podemos. ¡A otro perro con ese hueso! Su alianza escrita con Ciudadanos es intragable como lo es la alianza, quizás temporal, con el PP con la excusa de actuar por el bien de España. ¡A otros perros con este otro hueso, figurín Pedro Sánchez! Aquí el único coherente es el Presidente Rajoy, tan pasivo como es habitual en él, tan alejado de soluciones que signifiquen una implicación, tan amenazador como solo es posible en un espíritu débil.
Y mientras, los pajes del señor Mas siguen la ruta que se les marcó, tragando sus incoherencias, contando en la oscuridad de su covacha independentista los caudales –de dinero, porque de ineptitud y arrogancia ya son multimillonarios– que acumularán, siguiendo el rastro del ex honorable señor Pujol y de su cabeza visible, el descendiente de filibusteros dedicados al tráfico de esclavos señor Mas, que quizás tenga la pretensión de hacer esclavo a medio pueblo catalán y venderlo más tarde, y que ahora, para salvar su imagen del deterioro total, recula en la causa independentista.
Con los pobres y fantasiosos materiales con que han construido esta fantasía de la independencia y sus escasos talentos, ajenos sobre todo a la previsión económica y política, y enfrentados a un bunker gallego semi-oculto y correoso –al enemigo hay que verle la cara para atacarle– el fracaso de la aventura está garantizado. Aquel viejo refrán “A río revuelto, ganancia de pescadores” aquí no se cumplirá. Por suerte.

                                                          PABLO DEL BARCO